jueves, 25 de agosto de 2011

Ipanema

La sombra de una palmera evitó su deceso. El sol quemaba las cabezas y doraba los cuerpos en la playa de Ipanema. Hace días que el frío de Quito lo despidió a la entrada del aeropuerto Mariscal Sucre. Manuela jamás se enteró de que dejó la ciudad. En medio de la arena recordó la delicadeza de sus manos cuando ella lo recorría. Un cangrejo viejo y malhumorado lo empujó a su paso. Con el pasar de los días Manuela perdía las esperanzas de volverlo a ver. Era la primera vez que perdía uno de sus libros...

jueves, 18 de agosto de 2011

Viejos oficios

Joaquín no era de los que renegaba  que la virgen del Panecillo le dé la espalda, de que el estadio más cercano sea el del Aucas, de que por la distancia no pueda ir a la Zona y tenga que farrear en la Michelena, o de que las chicas más bonitas del colegio vivan lejos y crean que el sur es uno de los valles que rodean a Quito. Nada de eso… Joaquín renegaba porque eran las 22:00 y su madre tenía que salir al trabajo…

lunes, 8 de agosto de 2011

Quitosaurios

El ruido de los patrulleros, las sirenas de las ambulancias y del 911 terminaron con su sueño. Los noticieros informaban alarmados la noticia, las vecinas murmuraban en la calle. Violeta no entendía nada. Salió como siempre atrasada a la universidad, miro hacia el occidente, las piernas le temblaron. Las montañas del Pichincha habían desaparecido. Enseguida se recordó a los 7 años con trenzas y cerquillo, en ese tiempo imaginaba que el Guagua y el Ruco eran unos dinosaurios gigantes y  que su madre nunca había viajado a España.

jueves, 4 de agosto de 2011

Parte Meteorológico

Julio salió temprano de  casa. Abrigado y con paraguas en mano, su sombra lo siguió apresurado. Al medio día la ciudad era un carnaval. Julio caminaba distraído por la avenida Patria mientras su sombra se refrescaba del inclemente sol con un helado de paila. Antes de que los burócratas salgan de las oficinas, las gotas  de lluvia tejían recuerdos en el pavimento. Julio se estancó en el tráfico, su sombra se tomaba un café para mitigar el frío. Por la noche, la ciudad se sumergió en la neblina. Julio no encontró el camino a casa, su sombra desapareció…